Correa está depre
Francisco Correa, el presunto capo -o cabeza de turco- de la trama Gürtel está deprimido. La situación ha llegado a tal extremo que se le ha vuelto a incluir en el Protocolo de Prevención de Suicidios. Que esté tranquilo, que ese protocolo funciona.
No me extraña, yo también estaría deprimido. Después del tren de vida que ha llevado, de lujos, de ostentosidad desenfrenada, de esa sensación casi lujuriosa de impunidad, pasar a las cuatro paredes de su celda del módulo 9 de la cárcel de Soto del Real es para que deprima a cualquiera.
Pero, ¿saben que es lo que más le debe deprimir? Ver como no caen todos los que debieran caer, cómo esos mismos, hasta se olvidan de él. Que al menos le envíen un traje de regalo, que eso no está mal visto...
Y mientras, al secretario general del PP valenciano Ricardo Costa no le tiembla la voz al asegurar que el informe policial hecho público ayer, en el que se revela una doble contabilidad, una parte en dinero negro, y una trama de facturas falsas hechas en el propio PP valenciano, "es falso" y que "se trata de un montaje realizado a instancias del ministro del Interior", Alfredo Pérez Rubalcaba.
Veremos cuánto tiempo tarde el PP en sacar otro caso de corrupción del PP para desviar las miradas... o sacarse de la manga espías, escuchas o doble agentes, qué se yo.
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