La Iglesia vuelve a perder el norte
Indignante el último comunicado de Conferencia Episcopal a raíz del intento de reprobación de las palabras de su líder al asegurar que el preservativo contribuye a propagar el SIDA. El comunicado tiene la desfachatez de indicar que esta reprobación "pone en peligro el principio de la libertad religiosa". ¿Por qué? Porque según esta organización religiosa, las instituciones del Estado se deben abstener "intervenir en el libre desarrollo de las instituciones religiosas, y en nuestro caso, de la Iglesia Católica, mientras no esté probado que atenten contra el orden público". Acaso no hay cierte interferencia si estamos lanzando a nuestros jóvenes ese ridículo mensaje?
La Iglesia, desde luego, debe de estar encantada con los resultados de la última Encuesta sobre Sexualidad y Anticoncepción en la Juventud Española. Qué vergüenza.
Lo de la Cope, también es para echar de comer aparte. Se pregunta si "acaso es función del Parlamento español reprobar a un jefe de Estado"... Ahora tratamos al Papa como jefe de Estado cuando nos conviene, para terminar de llevar al traste con la separación Iglesia-Estado. Pero, ¿en qué país de necios vivimos o creen que vivimos?
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