Cuando la realidad supera la ficción

Las mejores historias de terror están siempre basadas en las peores historias reales. Así lo ha demostrado el cine en múltiples ocasiones y ahora se encarga de hacerlo la propia realidad. Echen un vistazo al blog de Pablo Herráiz donde, bajo el título No se puede ser más cruel, se describe un crimen estremecedor.

¿Cómo pueden dos personas infringir tanto sufrimiento a un ser humano? ¿Cómo puede causar placer ver agonizar a un semejante, minar su moral hasta límites que traspasan la cordura? En los comentarios se les llama "animales" y "bestias", pero que nadie se equivoque: los animales son mucho más humanos que las ahora juzgadas.

Mal comienzo de semana, lo sé. Tan sólo espero que no sea preludio de lo que aún resta por delante.