El presidente insuficiente
Aún no he leído ningún periódico, no he escuchado la radio. No he querido, en definitiva, 'contaminarme' con la lectura que los medios hacen de la entrevista de anoche al presidente del Gobierno en La1. Me acosté con la sensación, ciertamente preocupante, de tener un presidente insuficiente.
Un presidente que tira balones fuera, que sólo admite los errores más innegables y únicamente después de que haya pasado más de un año y los expertos internacionales le hayan dado el suspenso -me refiero al punto en el que por fin el Gobierno admitió que teníamos delante "la peor crisis de los últimos 80 años", como dijo anoche".
Un presidente que lleva su panfleto preparado, da igual qué le pregunten, no se sale del guión. La pobre Pepa Bueno me daba pena; una y otra vez intentaba ejercer de buena periodista y Rodríguez Zapatero se empeñaba en eludir las respuestas.
¿Cuándo se darán cuenta los políticos que admitir errores, que reconocer públicamente que las cosas se han hecho mal y asegurar que se pondrán todos los medios para no volver a defraudar a la ciudadanía les puede ayudar a subir puntos en las encuestas, que parece ser lo único que les importa? Subirían seguro, porque sería algo inédito.
Pero es no es posible. Igual que en el trío periodista se pudo comprobar quién estuvo a la altura, con la Bueno a la cabeza, y quién ha perdido el olfato periodístico por no salir de un plató, el político también pierde su olfato cuando no ejerce como tal... y Rodríguez Zapatero lleva demasiado tiempo jugando con las encuestas.
Un presidente que tira balones fuera, que sólo admite los errores más innegables y únicamente después de que haya pasado más de un año y los expertos internacionales le hayan dado el suspenso -me refiero al punto en el que por fin el Gobierno admitió que teníamos delante "la peor crisis de los últimos 80 años", como dijo anoche".
Un presidente que lleva su panfleto preparado, da igual qué le pregunten, no se sale del guión. La pobre Pepa Bueno me daba pena; una y otra vez intentaba ejercer de buena periodista y Rodríguez Zapatero se empeñaba en eludir las respuestas.
¿Cuándo se darán cuenta los políticos que admitir errores, que reconocer públicamente que las cosas se han hecho mal y asegurar que se pondrán todos los medios para no volver a defraudar a la ciudadanía les puede ayudar a subir puntos en las encuestas, que parece ser lo único que les importa? Subirían seguro, porque sería algo inédito.
Pero es no es posible. Igual que en el trío periodista se pudo comprobar quién estuvo a la altura, con la Bueno a la cabeza, y quién ha perdido el olfato periodístico por no salir de un plató, el político también pierde su olfato cuando no ejerce como tal... y Rodríguez Zapatero lleva demasiado tiempo jugando con las encuestas.
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