La Facultad de Navales de la UPM niega por sistema la celebración de actos LGTB
Nueva entrega de la serie de reportajes LGTB de esta semana. En esta ocasión, el contrapunto a alguno de las entradas ya publicadas puesto que hablaré de Arcópoli, la Asociación de Lesbianas, Gays, Transexuales, Bisexuales, Queer y Heterosexuales de las Universidades Politécnica y Complutense de Madrid yAlcalá de Henares -aunque el año que viene verá la luz también en la Carlos III y está en ciernes en la Rey Juan Carlos.
Rubén López es su coordinador general y asegura que "la gente joven está muy activa; los de 30 o 40 años luchan menos que los de 20". Y es que en su favor tienen que el miedo se va desvaneciendo poco a poco y, como apunta Rubén, "los jóvenes de ahora están mucho más seguros, más fuertes, porque han nacido con muchos derechos ganados y combaten la desigualdad social en su universidad o en el trabajo". Un ejemplo de ello es "el caso de una chica transexual, cuyos compañeros de piso la marginan y no le habla nadie".
Parte de su activismo se plasma en manifestaciones públicas, como las concentraciones pacíficas en la puerta de Intereconomía denunciando su homofobia. Otras veces, se concreta en charlas informativas o actos culturales, si bien no siempre lo tienen fácil. Rubén denuncia que "la Facultad de Ingeniería Naval de la UPM no nos ha cedido jamás ninguna sala para actos de Arcópoli, con las excusas más peregrinas".
Por el contrario, donde Arcópoli no encuentra ningún veto es en Internet, donde se muestra muy activa con su perfil de Facebook, con el que "damos transparencia a todas nuestras actividades, desterrando esas acusaciones de quienes no nos conocen de que seamos una sectas o criminales o degenerados”.
Rubén López es su coordinador general y asegura que "la gente joven está muy activa; los de 30 o 40 años luchan menos que los de 20". Y es que en su favor tienen que el miedo se va desvaneciendo poco a poco y, como apunta Rubén, "los jóvenes de ahora están mucho más seguros, más fuertes, porque han nacido con muchos derechos ganados y combaten la desigualdad social en su universidad o en el trabajo". Un ejemplo de ello es "el caso de una chica transexual, cuyos compañeros de piso la marginan y no le habla nadie".
Parte de su activismo se plasma en manifestaciones públicas, como las concentraciones pacíficas en la puerta de Intereconomía denunciando su homofobia. Otras veces, se concreta en charlas informativas o actos culturales, si bien no siempre lo tienen fácil. Rubén denuncia que "la Facultad de Ingeniería Naval de la UPM no nos ha cedido jamás ninguna sala para actos de Arcópoli, con las excusas más peregrinas".
Por el contrario, donde Arcópoli no encuentra ningún veto es en Internet, donde se muestra muy activa con su perfil de Facebook, con el que "damos transparencia a todas nuestras actividades, desterrando esas acusaciones de quienes no nos conocen de que seamos una sectas o criminales o degenerados”.
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