Acampada de Sol, se acabó

¿Hay que cesar la lucha? NUNCA. Hay que coordinarse, hay que seguir trabajando codo con codo para llevar a los políticos propuestas concretas y, sobre todo, para evitar que el movimiento se diversifique y/o se desvirtúe. Comienzan a circular mensajes, correos que suplantan a Democracia Real Ya (DRY) y que convocan, por ejemplo, a una retirada masiva de capital el próximo 30 de mayo. DRY no lo ha desmentido en sus páginas de web o Facebook, a pesar de ser consciente de tal convocatoria, sembrando aún más la confusión.

La Acampada de Sol, epicentro del resto de campamentos, dedica más tiempo a mantener su infraestructura que a elaborar las medidas concretas y pensar en cómo llevarlas a los organismos competentes. No hay más que echar un ojo a sus lista de 'necesidades' o al hecho de que lo más novedoso de su asamblea del lunes fue la elaboración de un protocolo de actuación en caso de desalojo.

Aplaudo sobremanera su anuncio de convocar asambleas por barrios, pero para hacer eso no es necesario un campamento. Es mucho más operativo y efectivo coordinar este trabajo a través de las redes sociales y, cuando sea necesario, convocar una asamblea en un punto de la ciudad. Me van a perdonar, pero entiendo a los comerciantes de la Puerta del Sol que han visto sus negocios perjudicados y han esperado hasta pasadas las elecciones para trasladar su queja al ministerio del Interior.

Por otro lado, las críticas a los medios de comunicación y las acusaciones de manipulación han estado flotando en el ambiente desde el principio por parte de los acampados. Curiosamente, son muchos los medios que han protestado por verse entorpecidos en su labor informativa -y a alguno de los periodistas, comprometidos con la causa, lo conozco personalmente y no se quejaría si no estuviera justificado-. Cuidado con esos pequeños detalles o con no incluir en su página web más que los titulares que les favorecen y, desde el 21 de mayo, no publicar los que hablan de 'acampada se queda sin fuelle', porque también emborronan la imagen, como también lo hace el rechazo a participar en 59 segundos. La justificación de que el movimiento no es capaz de nombrar a un único portavoz que represente a todos es comprensible, pero no sé si del todo justificable. Los egos afloran y los afanes de protagonismo también, pero quizás podría designarse un portavoz con un guión pactado asambleariamente y, todo lo que se salga de ese guión, no se responde alegando que no hay consenso al respecto. Básicamente, lo que hace uno de esos 'políticos profesionales', pero con más transparencia. ¿Qué problema hay?

En resumen, SIGAMOS EN LA LUCHA, pero de un modo efectivo, sin deteriorar la imagen tan grandiosa que se había conseguido hasta ahora en el mundo entero, desmintiendo falsos comunicados y, sobre todo, trasladando las iniciativas concretas cuanto antes a las instituciones pertinentes, haciendo su seguimiento y presión para cumplimento.