Extirpar la corrupción

Hoy se celebra la XXII Cumbre Iberoamericana en Cádiz con el principal objetivo de buscar salidas conjuntas a las crisis con el recurrente discurso de la internacionalización de las pymes y demás patrañas.Resulta irónico cómo en las campañas electorales, en las grandes cumbres y en discursos ante grandes auditorios sale siempre a reducir el pequeño empresario, a veces, incluso, el emprendedor. Será la única ocasión en que lo haga porque, a la hora de la verdad, sólo importan las grandes multinacionales y la banca.

Ahí van dos buenos ejemplos de ello. A pesar de ser culpables de la crisis, de haber cometido delitos y no haber pagado aún por ello, las cajas aceleraron los desahucios para poder colocar más viviendas en el banco malo. Indecente. El hecho salpica de pleno al Gobierno, puesto que quienes lo han hecho son las entidades nacionalizadas, o sea, del Estado (al menos mientras se sanean, que cuando sean rentables ya se les dará a algún amiguete).

El otro ejemplo es Eurovegas, cuyas rebajas fiscales pasarán del 45 al 10% mientras es la ciudadanía la que paga la crisis, viendo desmantelada su Educación y su Sanidad, sus impuestos incrementados y su derecho constitucional a la vivienda violado sistemáticamente mientras hay diputados con varias viviendas (alguna de ellas en la capital) y siguen cobrando dietas de alojamiento en Madrid. Demasiada corrupción que hay que extirpar.

De un modo u otro. Señores políticos, podemos hacerlo de la manera fácil (y democrática) o difícil (y legítima). Pero hay que hacerlo.